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Las direcciones oeste noroeste de la mayoría de las estructuras geológicas del Geoparque (pliegues y fallas) han condicionado de forma muy marcada no solo algunas de las características ambientales de la zona, sino que han afectado también a los usos tradicionales que los seres humanos han hecho del territorio a lo largo de la historia. Muchas de las características, tanto del “Vallejo” como de “El Monte” (hayedo de Paúl), están relacionadas con esos condicionantes geológicos.

"El Vallejo”es un estrecho y largo valle (9,5 km de largo por apenas 300 m de ancho) delimitado al norte y al sur por dos potentes bancos de caliza y desarrollado sobre una formación de arcillas margosas del Cretácico superior. Este valle, que sigue la dirección del gran sinclinal de Peña Lora, ocupa su flaco norte y debido a sus características, sus tierras han sido utilizadas como pasto para el ganado y más recientemente como campos de cultivo de secano.

El hayedo de Paúl es uno de los bosques de hayas más meridionales de la Cordillera Cantábrica. La presencia de este bosque se explica por factores climáticos, biogeográficos y por supuesto geológicos. El gran sinclinal colgado de la Peña Lora, que se eleva a más de 1000 m de altitud, genera una importante ladera umbría en su cara norte donde se dan las condiciones óptimas para que se pueda desarrollar este maravilloso bosque atlántico.

Una de las cosas que destacan en esta geosenda es la diversidad de paisajes y ambientes que se recorren en muy pocos km: el Valle de Valdelucio, las extraordinarias laderas, riscos calizos y espectaculares paisajes vistos desde la Peña Lora o el magnífico bosque atlántico del hayedo de Paúl.

En esta senda, además, se pueden ver elementos destacables del patrimonio culturaldel Geoparque como son los dos chozosconstruidos en piedra secaque se encuentran en el propio Vallejo.

Fuente: Geoparque "Las Loras"